En Martinica, las caminatas en scooter de los mares son encuadradas por profesionales certificados. Para practicar el chorro esquí con toda seguridad, usted debe ante todo dirigirse a un operador especializado. Cita pues a Le Carbet, Vauclin, Fort-de-France, Trois Ilets o cerca de Lamentin con su
vehículo de alquiler en la Martinica. Además de gozar de un equipo totalmente fiable, serás acompañado por un guía dado diploma en el momento de sus vueltas en mar. Antes de lanzarles en esta aventura atípica, ustedes serán informados desde luego. Las agencias de alquiler de scooteres de mar les propondrán una variedad de fórmulas, yendo de un paseo de 30 minutos a un día completo con comida comprendida, para que ustedes pudieran sacar provecho de la aventura y de la isla en todo su esplendor.
El Roca del Diamante
En Martinica, el Peñasco del Diamante figura a la cabeza de los sitios ineludibles para los apasionados de chorro esquí. Usted se comprometerá así sobre cerca de 2 kilómetros al principio de la punta del Diamante para un paseo en mar, para dirigirse en el canal de Santa lucía. Durante su escapada en mar, usted tendrá el privilegio de dar la vuelta a este islote deshabitado. Desde lo alto de sus 175 metros, le seducirá por su belleza excepcional.
El asa de Arlet
El asa de Arlet también rebosa riquezas inéditas que descubren en el momento de un paseo en chorro esquí. Váyase al descubrimiento de las asas salvajes de la isla así como un cierto número de pueblos de pescadores pintorescos. Usted hasta podrá puntuar su paseo por una sesión de buceo. Si usted es más bien de naturaleza aventurero y curioso, déjese intentar por un rodeo a la Cueva a los Murciélagos. Localizando cerca del asa Negra, esta cueva poco profunda rebosa murciélagos que usted podrá observar con toda seguridad durante su sueño por el día. Usted tendrá que sólo bajar la cabeza para observar a una población de erizos de mar blancos, de erizos de mar negros y de serpientes mayores; de tesoros verdaderos y acuáticos.
Un
alquiler de coche en Martinica le llevará hacia los puntos luminosos excepcionales de la Martinica para entregarse a su deporte preferido de deslizamiento.